31/10/11

Pedro Molina García me echa. Yo me quedo

Ante la sanción que me ha impuesto Pedro Molina, hoy es el último día en que podré utilizar estas listas de la Universidad de Almería y otros bienes muebles e inmuebles de la misma. Pedro Molina me impide hacerlo a partir de mañana. Pero no me podrá prohibir que siga trabajando desde los pasillos y otros ámbitos para conseguir que lo que considero una injusticia no pase desapercibida y la sanción finalmente se le imponga a quien realmente se la merece.
Estoy convencido de que si existe corrupción y de que si personas corruptas nos gobiernan en algunos ámbitos es porque queremos y les dejamos, con nuestra pasividad o con nuestra aquiescencia, haciéndonos cómplices de una u otra forma, desde mi punto de vista.
He sido, soy y seré un defensor del espacio público. Llevo más de 20 años trabajando en universidades públicas y, aunque Pedro Molina quiera echarme, yo no me voy, sino que seguiré trabajando, tanto en mis proyectos de investigación, como en mis reivindicaciones, en la defensa del espacio público de todos, sin permitir que una persona que yo considero que está actuando de forma corrupta en los temas que he planteado se adueñe de ese espacio de todos.
Sé que no soy el primero ni, desgraciadamente, seré el último al que un corrupto sancione y sufra su acoso laboral, pero intentaré, con todas mis fuerzas, establecer un referente positivo que sirva para luchar contra la corrupción universitaria.
Os doy las gracias a todos lo que os habéis sumado a algunas iniciativas que pretenden que se investiguen los hechos y se depuren las oportunas responsabilidades, tras el esclarecimiento de los hechos y no antes. Con las actividades que iré realizando quiero transformar esta injusticia que entiendo que me realiza Pedro Molina en una oportunidad para establecer ese referente positivo contra la corrupción universitaria, de modo que, para mí, a partir de ahora, consideraré un honor, más que un desmérito, el que Pedro Molina, un rector al que yo he denunciado por corrupción, me haya sancionado precisamente por hacer públicas mis denuncias. Lo destacaré en mi curriculum entre las distinciones y galardones conseguidos y a partir de ahora todos los trabajos de investigación que firme, que espero que sean muchos (trabajaré por ello), los rubricaré del siguiente modo: "Profesor Titular de Estudios Árabes e Islámicos, sancionado y suspendido temporalmente por Pedro Molina García, rector de la UAL, por haberlo denunciado públicamente por prevaricacion, fraude, tráfico de influencias, difamación, acoso laboral y abuso de poder".
Me gustaría que Pedro Molina me impusiera lo que yo considero una distinción en acto público, pero como seguramente no se prestará a ello y como dice el dicho de "si la montaña no viene a Mahoma, pues Mahoma irá a la montaña", trataré de que así sea o, por lo menos, públicamente, conteste a una serie de preguntas que considero claves y que tratarán de dejarlo en evidencia.
Por una universidad que trabaje por desterrar de ella la corrupción.